La explosión de un coche bomba causó el derrumbe del techo del edificio donde se encuentra Caracol Radio, una de las principales radiodifusoras de Colombia, la mañana del 12 de agosto alrededor de las 5:30 horas.
El atentado, que dejó nueve heridos leves, sucedió media hora antes de la transmisión de la primera parte de los informativos. El edificio alberga también las oficinas de la agencia española EFE.
El director de Caracol Radio, Darío Arizmendi, hizo un recuento del drama al aire, en directo, antes de ser evacuado por agentes de seguridad. Mencionó que era un atentado contra la libertad de prensa y que no se dejarían callar.
“No nos harán regresar al pasado", declaró María Isabel Rueda, periodista de La W Radio (del grupo Caracol), recordando los atentados que tenían lugar cotidianamente en los años 80.
Juan Manuel Santos, sucesor de Álvaro Uribe fue investido el pasado 7 de agosto como presidente de la República; él, que también fue periodista, acudió rápidamente al lugar de los hechos jurando “combatir a los terroristas”.
Una pésima señal de ‘bienvenida’, dice Reporteros sin Fronteras
El atentado constituye una muy mala señal, para la prensa y para el país, apenas una semana después de la sucesión en la Casa de Nariño.
Este plazo, extremadamente corto entre la investidura presidencial y el atentado, que no ha sido reivindicado, debe incitar a las autoridades a la prudencia.
¿Quiénes son, en este caso, los terroristas de los que habla Juan Manuel Santos?
La “guerra contra el terrorismo” tuvo un costo elevado para la prensa bajo la administración precedente. Una investigación seria, imparcial y que no excluya ninguna pista debe determinar el origen de este acto criminal.
Desde Reporteros Sin Fronteras expresamos nuestra solidaridad con los colegas de Caracol Radio y de la agencia EFE, deseando que las actividades de los dos medios de comunicación puedan continuar. Deseamos también un rápido restablecimiento a las víctimas.