La Organización de Naciones Unidas ha anunciado que retirará antes de final de junio a 2.000 miembros de su misión de mantenimiento de paz en la República Democrática de Congo (RDC).
Según informaron fuentes de Naciones Unidas, se propondrá que los 20.000 restantes continúen en el país hasta que la situación de seguridad haya mejorado.
El embajador de Francia en Kinshasa, Pierre Jacquemot, declaró que "vamos a responder a la demanda del Gobierno congoleño de una retirada progresiva de la Misión de Paz de las Naciones unidas en la República Democrática del Congo (MONUC)
La retirada progresiva se basará en la evolución de los riesgos de seguridad a los que se enfrenta el país", explicó.
Jacquemot, además, adelantó que con toda probabilidad la ONU propondrá que dichos riesgos sean evaluados por una comisión conjunta de la RDC y del organismo internacional.
Una delegación francesa del Consejo de Seguridad de la ONU planteará la propuesta al presidente congoleño, Joseph Kabila, durante la visita prevista para el próximo 15 de mayo.
Por su parte, el portavoz del Gobierno, Lambert Mende, ha confirmado que la República Democrática de Congo aceptará la retirada de los 2,000 efectivos.
La misión de mantenimiento de paz en la República Democrática de Congo (MONUC) se creó a raíz de la guerra de 1998-2003, en la que hubo millones de víctimas, y desde entonces ha crecido hasta convertirse en la mayor misión de paz del mundo.
Sus tropas respaldan a las fuerzas gubernamentales en la lucha contra la miríada de movimientos insurgentes que salpican el país. Kinshasa asegura estar dispuesta a sustituir a la MONUC una vez ésta se haya retirado por completo y a pesar de las denuncias de algunas ONG, que afirman que unidades militares congoleñas han cometido violaciones de Derechos Humanos.
El embajador de Francia en Kinshasa anunció que la misión pasará a llamarse MONUSCO (Misión de Naciones Unidas para la Seguridad en el Congo) para mostrar su interés en la seguridad y la estabilización del país. "La misión de MONUSCO se centrará en asuntos esenciales: la protección de la población y la estabilización de la paz", explicó.
El Gobierno de Kinshasa aspiraba a que todas las tropas de la ONU se retirasen antes del 30 de junio, cuando el Estado celebrará sus 50 años de independencia de su antiguo colonizador: Bélgica; sin embargo, miembros de la ONU han advertido de que de esta forma se debilitarían las labores humanitarias y aumentarían las probabilidades de producirse una escalada.