Al menos 6,111 personas quedaron desempleadas en la primera quincena de marzo luego del potente terremoto chileno del pasado 27 de febrero.
Los ciudadanos más afectados por este caso fortuito fueron los del Biobío (centro-sur) Chile, que es también una de las regiones más golpeadas por el desastre natural; en esta zona, la cifra representa 3,000% de despidos.
El artículo 159 del Código del Trabajo permite despedir a empleados en casos de que una catástrofe natural afecte al sector productivo.
La ministra chilena de Trabajo, Camila Merino, señaló que los despidos por fuerza mayor deben ser aplicados por empresas que están imposibilitadas para realizar sus actividades.
"Es malo que las empresas se aprovechen para despedir trabajadores, usando esta causa sin pagar indemnizaciones. Estamos vigilando que no haya abusos en eso", aseguró la ministra del Trabajo.
La situación de desempleo en las zonas afectadas podría extenderse durante seis meses aproximadamente, hasta que las plantas de producción que sufrieron daños por el terremoto de magnitud 8.8 en la escala de Richter se recuperen, estimó Merino.
Declaró que al inicio de la próxima semana ya tendrán novedades con un paquete para reactivar la economía, pero sobre todo para resguardar el empleo en la temporada más fría, el otoño y el invierno, que ya están próximos en el país austral.
Según un diario chileno, el Gobierno de Sebastián Piñera podría entregar un bono de retención de hasta 50%, de un ingreso mínimo mensual de 157 dólares aproximadamente.
En Santiago de Chile los despidos por fuerza mayor pasaron de 51 en febrero a mil 357 en la primera quincena de marzo, lo que representa un aumento del 2,560%, mientras que en las regiones de Valparaíso (centro), y las sureñas de O'Higgins y el Maule la cifra se incrementó de 33 a 906 casos, el equivalente a 2,645%.
El terremoto que se registró el pasado 27 de febrero en la nación suramericana se cuenta como uno de los más fuertes de América Latina en los últimos 50 años y el primero después del sucedido en Haití el pasado 12 de enero de este año, que dejó más de 200 mil muertos.
Un último informe presentado por las autoridades chilenas señala que el desastre natural dejó 497 víctimas fatales, dos millones de damnificados y unas 1,500 viviendas completamente destruidas.