Para la entrega del galardón, el jurado ha considerado su capacidad de configurar la agenda de las investigaciones en materia de salud, establecer normas y articular políticas que aúnen principios éticos y científicos, además de prestar apoyo técnico a los países que lo necesiten.
Además, cree que la Organización Mundial de la Salud, galardonada con el Príncipe de Asturias de Cooperación Internacional, es una "de las instituciones más respetadas por su labor de salvaguardia del derecho fundamental de todo ser humano a la salud".
En la actualidad, la Organización Mundial de la Salud, que se fundó el 7 de abril de 1948, está integrada por 193 Estados miembros y dos asociados.
Entre sus mayores logros destacan la erradicación de la viruela, la reducción, en más de un 99%, de los casos de poliomielitis, la prevención y control de enfermedades infecciosas como el VIH Sida, la tuberculosis y el paludismo, la reducción de la mortalidad infantil, y la identificación y control de brotes epidemiológicos a nivel mundial, según recoge el acta del premio.